Campanas a difunto
Nueve de la mañana, suena una campana y lo hace lentamente, de forma constante cada cuatro segundos; toca a difunto.
Es el sonido que me acompaña a la lectura de un diario digital, y no puede ser mejor banda sonora la que tengo de fondo.
Ilustración: Paco Puentes
Según la Real Academia Española (RAE) la palabra 'luto' tiene acepciones como estas:
"Signo exterior de pena y duelo en ropas, adornos y otros objetos, por la muerte de una persona"
"Vestido negro que se usa por la muerte de alguien"
"Duelo, pena, aflicción"
España arde, se quema, ahora mismo y a esta hora hay más de una treintena de incendios forestales declarados en todo el territorio, el último en el Valle del Jerte, y más en concreto en la zona de la 'Garganta de los Infiernos'; desgraciadamente tampoco puede tener un nombre más apropiado.
Todo en mitad de una asfixiante ola de calor que hace más difíciles las labores de control y extinción por más medios que se pongan a disposición.
Emisiones de gases de efecto invernadero, por la quema de combustibles fósiles, hacen que las olas de calor sean cada vez más extremas en temperatura y más frecuentes y duraderas en el tiempo.
He de reconocer que antes odiaba esa expresión 'ola de calor', la veía exagerada, "es verano y en verano tiene que hacer calor" decía; me equivocaba, algo está ocurriendo y este algo debe ser solucionado por todos los países.
Utópico de mi.
España se quema, se viste de negro, enluta y no me refiero a sus habitantes, me refiero a su superficie, es un signo exterior de duelo, es una pena, una aflicción como dice la RAE.